“La innovación es la actualización de ideas en todos los niveles de la producción de bienes y servicios”.
La afirmación pertenece a Dan Breznitz, quien es codirector del Laboratorio de Políticas de Innovación de la Universidad de Toronto y acaba de publicar su libro “Innovación en lugares reales, estrategias para la prosperidad en un mundo implacable”.
Breznitz señaló en una entrevista a la BBC, que uno de los mayores mitos entorno a la innovación es asociarla como sinónimo de invención.
“Nos hemos obsesionado con una idea de innovación que no solo está equivocada, sino que también es peligrosa. Uno de los mayores mitos es creer que la innovación es invención. La innovación no es invención. Ni siquiera se refiere a la creación de prototipos”.
En este sentido, recalca que la innovación incluye todos los cambios y mejoras que se pueden hacer a una idea inicial, a las distintas maneras de producción o incluso a la forma de vender un producto o un servicio.
Por lo tanto, innovar es mucho más que una idea brillante. Es toda una estrategia de mejoras desde la concepción de la idea, hasta que llega a su público objetivo, crea bienestar y genera crecimiento económico.
Ecuador y la innovación
Ricardo González, gerente general de Latinnova, organización que impulsa y promueve el ecosistema de emprendimientos y negocios innovadores en Ecuador, dijo en una entrevista a Primicia:
“Ecuador es uno de los países más emprendedores de Latinoamérica, pero uno de los últimos en innovación”.
González detalla que el país es el segundo más emprendedor de América Latina, solo por detrás de Chile. Esa cifra contrasta por el lugar que ocupa en innovación: puesto 99 de 131 países, según el Global Innovation Index.
El especialista explica que la principal razón detrás de esta proporción, es que el emprendimiento ecuatoriano no supera los seis meses. Esto se debe a que el emprendedor se moviliza más por una necesidad puntual, que por el análisis del mercado y el aprovechamiento de una oportunidad.
En consecuencia, ello impacta en la capacidad de generar productos nuevos y soluciones disruptivas a las necesidades que tiene el mercado ecuatoriano. Una debilidad que tiene todo el potencial de convertirse en una gran oportunidad para quienes quieran emprender el camino de la innovación.
9 claves para innovar
- La innovación comienza por investigar o analizar el mercado tradicional para detectar oportunidades donde se puedan visualizar cambios disruptivos a lo conocido.
- El innovador descubre nuevos segmentos de mercado a los puede dirigir su nuevo producto o servicio. Para ello, vuelve a lo básico, a la funcionalidad, para desde allí ofrecer una nueva formulación.
- Para innovar hay que asumir riesgos. El desarrollo de nuevos productos, servicios o procesos no se detiene a pesar de estar en un entorno de cambio constante. Enfrentarse a estas dificultades es combustible para el proceso innovador.
- El negocio que quiere innovar no solo lo hace en función del producto o servicio que ofrece. También promueve una cultura de creatividad e innovación en el seno de su organización.
- El innovador prueba su propuesta de valor o prototipo, evalúa resultados y promueve nuevas alternativas.
- En una organización innovadora hay mecanismos para la transferencia de conocimiento entre sus integrantes y tecnologías que ayudan a cimentar esos conocimientos en la práctica diaria de la organización.
- El equipo innovador se atreve a reinventar la experiencia del cliente. Le ofrece productos y servicios de calidad, diferentes, disruptivos, aún en medio de la alta competitividad del mercado.
- Cada vez más, el concepto sostenibilidad forma parte de la agenda del empresario innovador. Todo proceso de innovación, ya sea mirando desde la propuesta de valor que se ofrece al mercado, o mejorando los procesos que dan vida a la propuesta de valor, apuntan a mejorar igualmente la relación y el impacto que la empresa, el producto o el servicio tienen sobre el ambiente.
- El innovador encuentra las vías para autogestionar el financiamiento del proceso de innovación, ello va desde la reinversión de la rentabilidad hasta la búsqueda y participación en los ecosistemas de financiamiento que ofrece tanto el capital privado, como el sector público.
Cómo fomentar la innovación
Cuando la cultura de la innovación impregna una compañía no hay miedo a alentar que los colaboradores tengan sus propias ideas de negocio y las lleven adelante.
Tal es el caso de grandes compañías, como Google o 3M Company, que fomentan que los trabajadores destinen 20% de su tiempo a pensar en proyectos de innovación que pueden convertirse en startups o en mejoras para los servicios o productos de la empresa.
Asímismo, la formación es clave para fomentar el crecimiento de esa cultura de innovación. Para innovar hay que estar permanentemente aprendiendo sobre nuevas tendencias, tecnologías, modelos de negocios, y más.
¿Te interesa saber cómo llevar adelante una estrategia de innovación dentro de tu empresa o negocio?
Es un buen momento para tomar el Programa de Innovación y Nuevos Negocios, de la Escuela de Negocios ESPAE de Espol. Para más información, haz clic en este enlace.